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Tatuajes inteligentes que monitorean la salud

2018-02-21
Harvard

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Su tinta, que contiene biosensores, cambia de color indicando los niveles de glucosa, la concentración de sodio y la temperatura corporal, entre otros datos médicos, de quien lo usa.

El progreso tecnológico se hace evidente en dispositivos cada vez más pequeños y prácticos. Los tatuajes inteligentes, una de las últimas tendencias en gadgets, suponen grandes cambios en los campos de la salud, seguridad y geolocalización.

El Dermal Abyss o abismo dérmico, como se le nombró a este tipo de dispositivos, fue desarrollado por investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y de la Escuela de Medicina de Harvard.

Esta forma de tatuajes permite obtener una serie de datos médicos de quien lo usa, como, por ejemplo, su ritmo cardíaco, los niveles de glucosa en la sangre, la intensidad de su trabajo muscular y la temperatura corporal.

El objetivo de estas instituciones es sustituir los wereables, dispositivos pensados para monitorizar la salud de los pacientes, pero que aún no son completamente incorporados a sus cuerpos, como lo son relojes inteligentes y medidores de presión arterial.

“Estos dispositivos no se integran totalmente en el cuerpo, además de que su corta batería y su necesidad de conexión inalámbrica pueden ser un problema», le indicó Ali Yetisen, investigador de Harvard, a Europa Press.

Los tatuajes inteligentes funcionan gracias a que la tinta tradicional es reemplazada por una que contiene biosensores, cuyos colores cambian respondiendo a las variaciones que presenta el cuerpo.

Por ejemplo, la concentración de glucosa se expresa en colores que varían del verde al marrón, mientras que los niveles de sodio -que pueden indicar deshidratación- se pueden evaluar al exponer el tatuaje a la una luz ultravioleta. El sensor de PH, por su parte, se manifiesta cambiando de púrpura a rosa.

Aunque ya existen prototipos funcionales, aún falta tiempo para que dicha tecnología entre al mercado. Sin embargo, la ciencia augura que este desarrollo permitirá diagnosticar y tratar enfermedades como la diabetes, la obesidad y las migrañas de forma poco invasiva.

Fuente: elespectador.com